¿Quieres viajar a Barcelona y visitar la casa Batlló? Este edificio es digno de ver y nosotras te contamos un poco más sobre él.
Viajar es una de las pasiones más comunes a todo ser humano, y en mi caso concreto, de destinos nacionales combinado con grandes urbes, siempre me quedo y me quedaré con Barcelona (aunque con los años me voy reconciliando con Madrid).
Y es que de Barcelona me vienen muchos recuerdos, el primero concierto de U2 en el Palau Sant Jordi, una guiness a los pies de la Sagrada Familia, el tranvía azul, la torre de Collserolla, y podría decir de memoría todos los sitios que pude visitar en mi primer viaje de turismo con diecinueve años.
Había terminado de estudiar el bachiller de Artes por áquel entonces y tenía la sensibilidad artística por las nubes (con el tiempo la he ido perdiendo, pero espero ir recuperandola), así que recorrí con mi hermana las principales obras de Gaudí de la ciudad de Barcelona: Park Güell (del que me traje un dragón que aún conservo, aunque a mi de aquella me parecía más bien un sapo), Sagrada familia, La pedrera y Casa Batlló.
Casa Batlló, un edificio digno de ver
La Casa Batlló la visité más adelante, en uno de mis viajes de fin de semana largo, y tuve la suerte (pagando la entrada) de poder recorrerla de arriba a abajo, con visita a la terraza incluida (aún conservo la foto subiendo por aquellas escaleras de caracol). Y hoy os quiero contar los hallazgos en Casa Batlló.
Desde Enero de este año se puede visitar la casa con la excepcionalidad de que están restaurando su planta noble y podremos ver dicha restauración en directo, una oportunidad única para ver trabajar a los restauradores recuperando el estucado original, donde además podremos aprovechar la ocasión de tener a un experto con nosotros para preguntarle lo que queramos ¿suena bien, verdad?
Este revistimiento se descubrió en 2017, ya que la casa está en continua restauración y conservación (cómo no puede ser de otra forma dado la categoría e importancia de esta obra de Gaudí).
Todos los profesionales que se encargan de dicha restauración tienen por delante un reto emocionante y delicado, un trabajo muy meticuloso que quedará para la historia, dejando al espectador ser participe de un momento único.
La técnica original empleada consistía en un estuco de cal de diferentes tonalidades. En él, después de las tres capas de estuco, se realizaron incisiones para dibujar el trencadís (troceado o mosaico) característico de esa planta y hacerle un acabado de cera. Es excepcional porque implica trabajar seis veces el m2 de pared, pero además por la calidad del acabado.
En el despacho del Sr. Batlló, las incisiones que en el resto de la planta se acabaron con cera, aquí se hizo con pan de oro.
Os podéis imaginar la belleza que encontraremos en la Casa Batlló una vez que está restauración se complete, pero mientras tanto podemos ser testigos y espectadores de lujo de la ejecución de dicha obra de arte.
Si las obras de Gaudí ya impresionan de por sí, esto hará la experiencia más única.
Tienes toda la información sobre la restauración en su web, y también podrás adquirir las entradas.