No hay un solo lector o lectora que no haya fantaseado con tener una habitación exclusivamente llena de libros, un lugar cómodo, acogedor, y aislado donde sumergirse en la lectura rodeada de estanterías hasta el techo. Y aunque este sueño no siempre se ajusta a la realidad por falta de espacio o por falta de presupuesto… eso no significa que no podamos tener un pequeño rincón personal para leer, descansar y disfrutar.
Si llevas tiempo queriendo montar el tuyo, pero no sabes por dónde empezar en esta entrada te contamos cómo puedes hacerlo sin complicarte y sin gastar mucho.

Dónde colocar tu rincón de lectura
Una de las claves para que el espacio funcione está en los pequeños detalles que lo hacen acogedor. Una vela decorativa, por ejemplo, pueden transformar el ambiente con solo encenderla. Las hay con fragancias suaves, cálidas, refrescantes… y algunas incluso están inspiradas en obras literarias.
El lugar que elijas también tiene su importancia. No hace falta una habitación entera. Puede ser un rincón del salón, un lado de la cama, o incluso un pequeño hueco bajo una ventana. Lo ideal es que esté algo apartado del paso y, si puede ser, que tenga buena luz natural. Pero si no, siempre puedes reforzarlo con una lámpara cálida o una guirnalda de luces.
Si quieres marcar visualmente ese espacio y darle un aire especial, puedes usar papel pintado en una sola pared o incluso en un trozo. Es un truco muy sencillo para delimitar el rincón sin separarlo físicamente del resto. También puedes colocarlo en el fondo de una estantería o sobre un panel apoyado en la pared, si no quieres pegar nada directamente. Hay muchísimos estampados y colores que pueden ayudarte a darle personalidad, sin salirte del presupuesto.
Una vez tienes elegido el sitio y definida la atmósfera, toca pensar en la comodidad.
No todo el mundo tiene espacio para una butaca enorme, pero eso no significa que no puedas estar a gusto. Un cojín grande, una colchoneta, una manta doblada y una silla que ya tengas pueden hacer el papel perfectamente.
Organiza tus libros y añade tu estilo
Y por ultimo, pero sin duda lo más importante, los verdaderos protagonistas: tus libros favoritos. Hay infinidad de modelos de estanterías y siempre habrá una que se ajuste tanto al espacio como a la cantidad de libros que tengas. Además, desde que están de tendencia los libros con tapas duras, lomos pintados y sobrecubiertas, ya son decoración en sí mismos.
También puedes colocar una planta pequeña, una taza bonita o una lámina que te inspire intercaladas con los libros. Lo justo para que cada vez que pases por delante te entren ganas de sentarte un rato.
Crear tu rincón de lectura no se trata solo de decorar. Es una forma de regalarte tiempo, de reconectar contigo, de darte permiso para no hacer nada más que disfrutar. Y no necesitas gastar mucho para lograrlo. Con un poco de creatividad y cariño, puedes transformar un rincón cualquiera en uno de tus lugares favoritos de la casa.